La “fidelidad a la castración” de lo individual anula el aporte personal a la comunidad
El viejo paradigma donde un líder salva a las masas resulta obsoleto en tiempos de madurez del humano. Porque ese antiguo paradigma anula el aporte individual, el poder se enquista en unos pocos y las personas se masifican y obedecen auto-castrándose sus propios dones y talentos.
Esa “fidelidad a la castración” de lo individual enferma, porque anula el natural crecimiento y desarrollo humano y sostiene el “infantilismo” que genera dependencia insana.
De la misma manera, el paradigma que sostiene que es una “corporación” la que va a salvar a la persona, también se agota; porque de alguna manera subestima el aporte individual.
La especie humana está madurando, recordando su verdadero Origen y desde ahí, sabiéndose parte de un Todo más Grande, siente el impulso de aportar lo propio al Servicio de la Vida.
En el libro “El Arte de ConVivir” con el Dr Roberto Ré, hablamos de ir hacia la “Inter-Independencia”, donde cada uno hace su aporte personal, poniendo en práctica sus dones y talentos al servicio de la comunidad, sin perder su individualidad (independencia) y sintiéndose parte de un sistema más grande (inter).