Las heridas en una relación de pareja …
Venganza con amor
por Bert Hellinger
Las heridas en una relación de pareja permanecen vivas mediante un recuerdo. Parecería como que esas heridas taparan algo anterior. Uno no habría accedido a comenzar la relación si no hubiera habido algo muy tentador y una linda felicidad. Es decir que sería posible rememorar el recuerdo anterior a la herida en la misma manera que el recuerdo de la herida posterior.
En el caso de la herida hay un cierto obstáculo para olvidarla y ese obstáculo es la necesidad de compensar. Cuando en una relación de pareja uno de los miembros ha lastimado al otro, cuando quizás lo ha lastimado en su dignidad, éste siente necesidad de compensar. Es decir que también lo ofenderá para que el equilibrio quede restablecido. Y dado que aquel que fue ofendido se siente en su derecho, ofende al otro un poco más. De esa manera la venganza se hace más dulce. Dado que ahora el otro fue agraviado un poco más de lo que él había hecho, también piensa en compensar y hace lo mismo. De esa manera el intercambio de agravios se va incrementando y une, porque no hay solución.
El secreto de la solución es dosificar la venganza. Debe haber venganza, eso por supuesto, pero venganza con amor. Ese es un arte muy elevado. Así que uno le hace un daño al otro como compensación. Eso debe ser así, caso contrario no sería respetado. Si uno simplemente lo perdonara sería grave. En recuerdo de la propia herida uno le tiene que hacer algo que le duela al otro pero un poco menos, sólo un poquito menos. Ese “poquito menos” permite que luego de la venganza tenga lugar un nuevo comienzo. Luego puede recomenzar el intercambio de las cosas buenas.