Aquello que elegimos como objetivo para crear en sintonía con el Creador, Grigori Grabovoi nos enseña a llevarlo a cabo en el área que le llama “espacio de control”, y se encuentra aproximadamente a la distancia de nuestro brazo.
En este espacio, visualizamos una pequeña esfera de 15 cm de diámetro aproximadamente, frente a nuestro pecho, de color blanco plateado.

Aquello que te perturba y elijes transformarlo (puede tratar de una emoción, evento, vínculo) lo llevas a esa esfera de luz delante de ti, y emites mentalmente, la orden de:
-¡Neutralizar!
Siente el cambio en las sensaciones.
El resultado es tu neutralidad emocional a este recuerdo negativo, evitando así, repetirlo hacia adelante.