Trabajo en una empresa y es necesario relacionarse con muchas personas que suelen ser muy diferentes. A veces me toca sentarme al lado de alguna que me habla demasiado y termina molestándome para mi trabajo, por lo cual estoy ahí y me pagan por ello. Entonces me cambio de lugar. Así, solucionando problemas y trabajando, siento que canalizo mi energía, y me encanta.

Qué bien… lo esencial es el RESPETO por el otro, que obviamente surge del respeto que uno se tenga  asi mismo. Yo no voy a cambiar al otro, no tengo derecho tampoco verdad? pero si puedo cambiar yo, asumo lo que siento y hago algo al respecto, porque me respeto a mi misma.
El “hacer fructífero” CREA ALEGRÍA NATURALMENTE, cuando lo que haces tu ves que tiene sentido, te sientes útil y eso genera alegría. Ahora bien, ¿de quien depende crear esto? de uno!!! de elegir SERVIR, servir con respeto, con aceptación de cada ser tal como es, comenzando por uno mismo, pues asi fluye naturalmente a otros. Todo comienza en mi interior y se expande hacia afuera. Si estoy en paz, esa paz la irradio a otros. En hora buena! adelante!